miércoles, 17 de septiembre de 2014

MUERTO POR LA "CULTURA"



Crónica del día: Tener que poner a la Cultura entre comillas como peyorativo de morir por amor al arte es, en el tema que nos ocupa hoy a los gatos de esta casa, tan lamentable como escuchar que está justificado matar a golpe de fiesta y tradición.

Para irse a dormir a pierna suelta y que no se altere el ritmo circadiano, dice el manual gático de las buenas costumbres nocturnas, que hay que hacerlo en condiciones óptimas de conciencia tranquila; que no medie discusión ni maullido que cause enojo, y que a los ojos no se les dilaten las pupilas por ver dolor o tragedia antes de intentar soñar con ángeles y sardinitas frescas.

Pero anoche, antes de que Morfeo acunara a todo habitante felino de esta casa, mis ojos se encontraron con los terriblemente hermosos y opacos de “Elegido”, el Toro de La Vega elegido para la ocasión de divertimento y barbarie humana. Herido de muerte y “cultura”, el astado dirigía su última mirada al personal que, frente a él, aullaba regurgitando alegría por su inminente y último lanzazo.

Malditos humanos, maullé sin ánimo de articular sonido alguno para no despertar todavía más a la conciencia, y tener que sorberme las lágrimas y el asco por tanta “cultura y tradición” que mata en nombre de las costumbres.

La madrugada me sorprendió visionando  un traje sin luces de negro y rojo en un albero convertido en monte y gresca humana, mientras un luto se esparcía entre nubes que barruntaban llanto y duelo.

Elegido… Qué ironía del destino llamarse como el elegido para  ser muerto en Tordesillas.