sábado, 28 de junio de 2014

MUERTE DE UN HADA.





Crónica del día:... "A cada paso sacudía cuentos, dibujaba mundos y, a veces, cuando podía, se escapaba todavía al bosque..."

 Para Ana MªMatute.

Ella hoy va y se muere. Como mueren las mujeres eternas y las perpetuas niñas. Con la edad aún palpitada de palabras, y con la mirada hacia el bosque mágico de sus sueños cumplidos. Pero vivirá siempre en su muerte; porque no hay parca que pueda acabar con su magia habitada de historias.

Yo pedí un día un deseo: Llegar a vivir 90 años lúcidos. Como ella, que casi llega a esos años donde la vejez no existe porque la edad nunca ha sido suficiente.
Y yo, como ella, amo al bosque siempre animado de cuentos; para sobrevivir en la jungla de la calle de mentira y mugres…

Conste que no me comparo (nunca llegaré a tanto), aunque me asaltan ilusiones junto a los árboles viejos, y me gustaría ser hada en mis ratos libres. Y, a mí, como a ella, nunca me gustó jugar a las mamás, porque lo mío era inventar palabras, ya, tan de pequeña. Incluso las creaba al revés, para que me crecieran muchas más en la boca y en los papeles garabateados de letras. Y aún hablo, a veces, todavía, al revés, junto a este castellano, panocho, manchego y libertario palabrerío mío, donde los tacos, que a veces suelto, siempre dejan ver que la buena educación también es mal hablada.
Y soy niña que juega a contar cuentos en la habitación soleada y las noches quietas. Que acuna, como ahora, un bebé gato en el regazo; que mira, con ojos mágicos, a los míos algo miopes y cansados de ver lo que la vida real esconde y muestra.

Por eso, de nuevo, subo al desván. He desempolvado un libro llamado “Olvidado rey Gudú”, que leí hace tanto tiempo, que casi tan solo recuerdo el nombre y que me escondió en sus hojas un tiempo en que yo quería hacer magia como el viejo hechicero…

No desearé que la escritora descanse en paz; sencillamente porque no ha muerto en la guerra, sino entre la maravillosa y mágica Literatura y en ella vivirá por toda la eternidad.

Gata Literata.

«Escribir es también una forma de protesta. Casi todos los escritores comparten el malestar con el mundo» Ana Mª Matute.

lunes, 2 de junio de 2014

¿JAQUE AL REY?



Crónica del día: “¿Y Franco que opina de esto?...¡Ay, leche¡ si dice vd. que Franco ha muerto”...Jesús, el abuelo de Majaelrayo, aquél anciano amable aferrado a su tierra, un pueblo aislado de todas partes, nos dejó una de las mejores parodias de lo que fue aquella España nuestra. De lo que perdura en ella.

Si el resultado de las elecciones al Parlamento Europeo, hubiera sido otro ¿habría abdicado el Rey? Pues a mí me da que no. Creo que hubiera aguantado en el trono hasta que los pies salieran de palacio antes que la cabeza. Pero lo importante es que ese día ha llegado, quizá porque los resultados electorales han dado un gran triunfo a una izquierda que no quiere al rey, ni en pintura. Pero en realidad,   lo que suceda con la sucesión, será más de lo mismo, porque volveremos a acatar el imperativo legal, viendo envejecer cubiertos de armiño  heráldico a los guapitos de cara de los herederos.

Quizá la lectura que deberíamos dar a esto, es que algo se ha movido y se mueve en este País de Nunca Jamás te con-fíes, que ha puesto en jaque al  Monarca que ha visto llegada su hora; porque la sombra de la izquierda es alargada. Es posible que sus asesores (que para eso se lo dictan todo al oído), le hayan dicho que, basta ya de remolinear en el trono; porque las cosas se están poniendo de un rojo morado, qué pá qué… Aunque, eso sí, los seguidores de la impuesta Monarquía quieren hacernos creer a los incrédulos, que aires frescos no seguirán alimentando la herencia de ayer; porque la juventud y mejor disposición del heredero, puede hacer que cambie la realidad… (algo que no se creen ni los que se lo inventan)

En esa jugada ajedrecística en salones abarrotados de trastiendas, es posible que le hayan dado Jaque al Rey, pero no Mate; porque si algo pasa en esta España heredada es que hay demasiados palmeros, todavía, esperando un trozo de pastel a las puertas de palacio. Algunas herencias, a veces, son dulces envenenados. Aquí, el veneno lo dejó bien sembrado aquel caudillo que tantos odiaron y demasiados aún quieren olvidar, pero ante el que, incomprensiblemente, las nuevas generaciones de la ¿libertad? siguen doblando la testuz para comerse enterito el dulce mortal.

Oigo y no escucho, para no contaminar mis oídos llenos de orejas, que muchos de la izquierda han tenido que ser “políticamente correctos” en el día de hoy,  en ruedas de prensa y diarios de opinión (como vienen haciendo desde que la dictadura se llamó democracia) para no caer en apostasía. Han tenido que dar parabienes al rey saliente y al entrante; porque aunque mucha izquierda (centrada a la derecha) no soporte al Monarca y le quisieran ver en Estoril, las consignas partidistas son las de que hay que besar la mano que quisieran ver quemada, y eso, en mi tierra y en mi cabeza, se llama cobardía y bajada de pantalones cagados. Porque si no te gusta el Rey, no te gusta y, si Franco ha muerto, ¿que leches hacemos guardando las apariencias, escondiedo los deseos, despreciando la libertad, apoyando cabezas con corona y, lo peor, dejando que mañana siga siendo ayer?

Salud y República.

Gata Literata.